El desafío de las altas cumbres
La grandeza de las montañas en todo su esplendor y el valor del propio esfuerzo se descubren especialmente en las actividades de alta montaña y alpinismo, en las que podremos acceder a mundos alpinos y remotos en los que la presencia humana sólo es una anécdota esporádica en su estado habitual de permanente soledad.
El Club permite adquirir los conocimientos adecuados para iniciarse en esta actividad mediante los cursos de alpinismo y la realización de las actividades fija los conocimientos y automatiza la respuesta adecuada a la circunstancia.
El Área de Alpinismo-Alta montaña ha venido programando distintos ciclos de actividad a lo largo de los años entre los cuales han destacado los Trofeos de Invierno y el Trofeo de Alpinismo Objetivo 3000 que permitieron a muchos socios realizar las ascensiones a un número considerable de las altas cimas de nuestro país.
El Área se estructura alrededor de una Responsable de Área y de un grupo de socios colaboradores que aportan sus conocimientos para diseñar cada temporada dos bloques de actividades que sirven de base en nuestro Calendario.
A estos ciclos o trofeos se agregan las actividades que otros socios, a título individual, programan para compartirlas con todos a través del Calendario de Actividades. En conjunto mas de 30 actividades año de diferente nivel de dificultad y esfuerzo, algunas realmente espectaculares.
Los últimos años el Área de Alpinismo programa:
- Ciclo de Promoción de Alpinismo Invernal. Desde que el frío aprieta y las cumbres se visten de blanco, los socios colaboradores del Área programan entre 7 y 10 actividades invernales cuya realización se prolonga hasta que los calores de la primavera van disolviendo la nieve. Son actividades de distinto nivel de dificultad, en las que se busca el equilibrio entre dificultad y seguridad. Habitualmente nos movemos en niveles de dificultad por debajo del PD+.
- Trofeo Grandes Cumbres. Cuando el sol ya calienta hay una nueva programación por parte de los integrantes del Área.. Cada uno de ellos aporta una o dos actividades conformando un nuevo ciclo cara al final de la primavera, verano y comienzo del otoño. Es el momento de recorrer crestas y aristas, ascender por paredes con la ayuda de material técnico, discurrir por las vías ferratas y llegar a tiempo al alojamiento para tomar un refrigerio con los compañeros.
Cuando hay posibilidad, al final del año, en el día del Club, se hace entrega de un modesto recuerdo a los socios que han participado en varias de estas actividades.
En el Club Alpino Madrileño declaran practicar en estos momentos actividades de Alpinismo o Alta Montaña 1.081 asociados/as.